quinta-feira, 26 de janeiro de 2012



O ANTICRISTO NOS PADRES DA IGREJA

SANTO IRINEU DE LIÃO

“Além disso, afirma o que já temos abundantemente demonstrado, isto é, que o templo de Jerusalém foi construído de acordo com a prescrição do verdadeiro Deus. O Apóstolo, manifestando a sua opinião, chama-o propriamente de templo de Deus. No terceiro livro dissemos que os apóstolos, falando em seu próprio nome, nunca chamam Deus a ninguém, a não ser ao verdadeiro Deus, o Pai de nosso Senhor, por ordem do qual foi construído o
templo de Jerusalém, pelos motivos apresentados acima, no qual se assentará o adversário querendo passar por Deus, conforme diz também o Senhor: “Quando virdes a abominação da desolação, de que fala o profeta Daniel, instalada no lugar santo...” (S. Ireneu de Lião, Contra as heresias, Livro V, 25,2; ed. Paulus, p. 585)


“É exatamente isto que fará o Anticristo no tempo de seu reinado:
transferirá o seu reinado para Jerusalém, assentar-se-á no templo de Deus, enganando os seus adoradores, fazendo com que creiam que é o Cristo.” (S. Ireneu de Lião, Contra as heresias, Livro V, 25, 4, 587)

Jeremias não somente indica a instantaneidade da sua vinda, mas também a tribo donde ele virá, com estas palavras: “Ouviremos o barulho da velocidade dos seus cavalos vindos de Dã; pelo relinchar dos seus cordéis em corrida, toda a terra se turvará; e ele virá, e devorará a terra e o que ela contém, a cidade e os seus habitantes.” (1 Ts 5,3; Jr 8,16) É esta a razão pela qual esta tribo não será contada, no Apocalipse, entre as que se salvam.” (S. Ireneu de Lião, Contra as heresias, Livro V, 30, 2, 599)


SÃO CIRILO DE JERUSALÉM

“y dándose a si mismo con mentira el nombre de Cristo; y con esa usurpación del nombre de Cristo
enganará a los judíos que esperan al Ungido(S. Cirilo de Jerusalém, Catequesis 15, 11, ed. Ciudad Nueva, p. 340)

“Al principio, como si quiera tratara de una persona sensata y prudente, simulará bondad, moderación y humanidad,
dando el pego a los judíos, como si fuese el Cristo esperado, con signos y prodígios” (S. Cirilo de Jerusalém, Catequesis 15, 11, ed. Ciudad Nueva, p. 340)

“ ‘Y dice tambiém: Que se opone y se alza sobre todo lo que lleva el nombre de Dios o es adorado. Sobre todo Dios; es decir, que el Anticristo odiará los ídolos:
Hasta el punto de sentarse él mismo en el templo de Dios (2 Ts 2,4)’. ¿Y de qué templo se trata? Habla del templo judio que fue destruído; ¡ por Dios !, que no se refiera a este en el que nos encontramos. ¿ Por qué décimos esto ? Para que no parezca que nos favorecemos a nosotros mismos. Porque si viene a los judíos como Mesías y quiere que lo adoren, para engañarles mejor mostrará su celo por el templo, sembrando la sospecha de que él es del linaje de David, el que reedificará el templo que ya fue construído por Salomón.” (S. Cirilo de Jerusalém, Catequesis 15, 15, ed. Ciudad Nueva, p. 342 / 343)


RUFINO DE AQUILÉIA

“Debemos saber, sin embargo, que esta venida salvífica de Cristo tratará de simularla fraudulentamente el enemigo con el fin de enganar a los fieles, presentándose el hijo de la perdición con signos y prodígios enganosos en lugar del Hijo del hombre, que se espera que venga el la majestad de su Padre, introduciendo en este mundo al Anticristo en vez de a Cristo; acerca de esto el
Señor en el Evangelio anunció a los judíos: Vine en nombre de mi Padre y no me recibisteis; vendrá outro en su nombre y recibiréis” (Jn 5, 43)(Rufino de Aquileya, Explicación del Símbolo, 32, ed. Ciudad Nueva, p. 94)


SÃO JERÔNIMO

“Egipto quedará em la desolación e Idumea se convertirá em um desierto de perdición, porque obraron inicuamente com los hijos de Judá, al derramar sangre inocente em su tierra. Dicen los Setenta: Egipto quedará destruído e Idumea se converterá em um campo de desolación a causa de las iniqüidades de los hijos de Judá, puesto que derramaron sangre justa em su tierra. Tambiém respecto a este pasaje a los
judíos los invade um sueño profundo, al forjarse la vana esperanza de que em los últimos tiempos, cuando van recibir, no a Cristo, sino al anticristo...” (S. Jerônimo, Comentário a Joel, Jl, 3, 19; Obras completas, IIIa, comentários a los profetas menores, ed. BAC, p. 385)


"Não cremos que o Anticristo seja, como alguns pensam, o diabo, ou algum demônio, senão que será algum homem em quem habitará corporalmente satanás inteiro" (São Jerônimo apud Sagrada Bíblia en latin y español con notas de D. Agustín Calmot, 1833)


SÃO JOÃO DAMASCENO

“Es necesario que el Anticristo deve venir. Em efecto, Anticristo es todo aquel que no confiese que el Hijo de Dios vino en la carne (Jn 4, 2-3), que es Dios perfecto y que juntamente com ser Dios se hizo hombre perfecto. Igualmente y en modo particular y especial, se dice Anticristo al que vendrá al final del mundo (Mt 13,40). Así pues, es necesario primero predicar el Evangelio en todos los pueblos (Mt 24,14), como dijo el Señor, como argumento para los judíos contrários a Dios. En efecto, el Señor les dijo: Yo vengo en el nombre de mi Padre y no me recibís, si outro viene en su próprio nombre, a ese lo recibiréis. (Jn 5,43) Y el Apóstol dijo: Puesto que no aceptaron el amor de la verdad para ser salvados, por esto les envio Dios una fuerza de engano para que creyeran a la mentira, para que sean juzgados todos los que no creyeron a la verdad, sino que se complacieron en la injusticia (2 Ts 2, 10-12).
Los judíos no recibieran al que era Hijo de Dios, al Señor Jesucristo que también es Dios; sin embargo, recibirán al enganador, al que dice de si mismo que es dios. (Cf. 2 Jn 7; Cf. Juan Crisóstomo, Homiliae in 2 Thess., 4, 1: PG 60, 487). Sin duda, el angel enseña a Daniel que el Anticristo se llamará a si mismo de dios quando dice: “No escuchará a los dioses de sus padres (Dn 11,37) Y el Apóstol dice: Que nadie os engane de ningún modo. Primero tiene que venir el hombre de la iniquidad, el hijo de la perdición, el opositor, el que se rebela contra todo lo llamado Dios o es objeto de veneración. De modo que se sentará en el Templo de Dios, no en el nuestro sino en el antiguo en el de los judíos, porque no vendrá a nosotros, sino a los judíos.” (S. João Damasceno, Exposición de la fe, Libro IV, 26 (99), ed. Ciudad Nueva, p. 305ss)


HIPÓLITO DE ROMA

"
Antichrist, who is also himself to raise the kingdom of the Jews." [Anticristo, nascerá do reino dos judeus] (Hippolytus of Rome, Treatise on Christ and Antichrist. n.25) “Now, as our Lord Jesus Christ, who is also God, was prophesied of under the figure of a lion, on account of His royalty and glory, in the same way have the Scriptures also aforetime spoken of Antichrist as a lion, on account of his tyranny and violence. For the deceiver seeks to liken himself in all things to the Son of God. Christ is a lion, so Antichrist is also a lion; Christ is a king, so Antichrist is also a king. The Saviour was manifested as a lamb; so he too, in like manner, will appear as a lamb, though within he is a wolf. The Saviour came into the World in the circumcision, and he will come in the same manner. The Lord sent apostles among all the nations, and he in like manner will send false apostles. The Saviour gathered together the sheep that were scattered abroad, and he in like manner will bring together a people that is scattered abroad. The Lord gave a seal to those who believed on Him, and he will give one like manner. The Saviour appeared in the form of man, and he too will come in the form of a man. The Saviour raised up and showed His holy flesh like a temple, and he will raise a temple of stone in Jerusalem. (Cristo mostrou Sua carne como um Templo, e se levantou no terceiro dia; e ele, também, levantará novamente o Templo de pedra em Jerusalém.) And his seductive arts we shall exhibit in what follows. But for the present let us turn to the question in hand. (S. Hippolytus of Rome, Treatise on Christ and Antichrist. n. 06)


“For in every respect that deceiver seeks to make himself appear like the Son of God. Christ is a lion, and Antichrist is a lion. Christ is King of things celestial and things terrestrial, and Antichrist will be king upon earth. The Saviour was manifested as a lamb; and he, too, will appear as a lamb, while he is a wolf within. The Saviour was circumcised, and he in like manner will appear in circumcision. The Saviour sent the apostles unto all the nations, and he in like manner will send false apostles. Christ gathered together the dispersed sheep, and he in like manner will gather together the dispersed people of the Hebrews. Christ gave to those who believed on Him the honourable and life-giving cross, and he in like manner will give his own sign. Christ appeared in the form of man, and he in like manner will come forth in the form of man. Christ arose from among the Hebrews, and he will spring from among the Jews.
Christ displayed His flesh like a temple, and raised it up on the third day; and he too will raise up again the temple of stone in Jerusalem. And these deceits fabricated by him will become quite intelligible to those who listen to us attentively, from what shall be set forth next in order.”(Hippolytus de Roma, A discourse by the most blessed Hippolytus, bishop and martyr, on the end of the world, and on Antichrist, and on the second coming of our lord Jesus Christ. Section XX)



“For as Christ springs from the tribe of Judah, so
Antichrist is to spring from the tribe of Dan. And that the case stands thus, we see also from the words of Jacob: "Let Dan be 'a serpent, lying upon the ground, biting the horse's heel." (Gn 49, 17. Dã será uma serpente no caminho, uma cobra na estrada, que morde a pata do cavalo e derruba o cavaleiro.)(S. Hippolytus of Rome, Treatise on Christ and Antichrist. n. 14)

SÃO JOÃO CRISÓSTOMO

“Yo he venido en nombre de mi Padre y no me recibís. Si otro viene en su nombre propio, a ése lo recibiréis. ¿Observas cómo continuamente afirma haber venido para esto, y haber recibido del Padre la potestad de juzgar, y que nada puede hacer de sí mismo, todo con el objeto de quitar toda ocasión de malicia? Mas ¿a quién se refiere al decir que vendrá otro en nombre propio? Deja aquí entender a! Anticristo y con un argumento irrebatible les demuestra su perversidad [de los
judíos] ... También por aquí podía haberles demostrado que no amaban a Dios, pues no recibían al que se decía enviado de Dios. Pero demuestra la impudencia de ellos por el camino contrario, o sea que al Anticristo sí lo recibirían. Puesto que no recibían al que se decía enviado de Dios, y en cambio más adelante adorarían a otro que no conocería a Dios, sino que, lleno de jactancia se diría él mismo ser Dios, quedaba manifiesto que la persecución tenía como origen la envidia y el odio de Dios... Pablo, hablando del Anticristo proféticamente, dice: Les enviará Dios toda suerte de seducciones perversas para que acaben condenados, pues no creyeron en la verdad, al paso que se complacían en la injusticia”. (S. João Crisóstomo, Homílias sobre el evangelio de san juan /2, Ed. Ciudad Nueva, p. 131. Homilia 41, Juan 5, 39-47)
"Quem será este Anticristo? Será satanás? Não, senão um homem em quem se encontrará toda a eficácia de Satanás, porque segundo o Apóstolo, será um homem que se levantará contra tudo que se chama Deus" (São João Crisóstomo, apud Sagrada Bíblia en latin y español con notas de D. Agustín Calmot, 1833)

SANTO HILÁRIO DE POITIERS


“O de otro modo, el Señor da a conocer un indicio seguro de su venida futura diciendo: "Cuando viereis que la abominación". Esto lo dijo el profeta refiriéndose a los tiempos del Anticristo. Fue llamada abominación, porque viniendo contra Dios, reclama para sí el honor de Dios; y abominación de desolación, porque ha de desolar toda la tierra con guerras y mortandades, y por esto,
recibido por los judíos, se instalará en el lugar de santificación, para que donde se invocaba a Dios por las súplicas de los santos, recibido por los infieles, sea venerado con los honores de Dios. Y porque este error será más propio de los judíos, que por haber menospreciado la verdad abracen la falsedad, les aconseja que abandonen Judea y se marchen a los montes, no sea que mezclándose con aquellas gentes crean en el Anticristo y no puedan escapar de la perdición. Y lo que dice: "Y el que esté en el tejado no descienda", etc., se entiende de este modo: El techo es lo más alto de la casa y la conclusión más elevada de toda habitación; por lo tanto, todo aquél que se esforzare en la conclusión de su casa (esto es, en la perfección de su corazón), y en hacerse nuevo por la regeneración, y elevado según el espíritu, no deberá rebajarse por la codicia de bienes mundanos. "Y el que estará en el campo", etc., esto es, cumpliendo con su deber, no vuelva a los cuidados antiguos, por los que habrá de volver a tomar el vestido formado por los pecados viejos con que se cubría”. (San Hilario de Poitiers, in Matthaeum, 25, apud Catena Áurea de São Tomás de Aquino, Mt 24,15-22)Nos dias difíceis e de tempestade da Igreja, ai das almas minadas pela incerteza e nas quais a fé e a piedade estiverem ainda em estado embrionário ou ainda na infância. Umas, surpreendidas no embaraço de suas incertezas e atrasadas por causa das irresoluções de seu espírito constantemente irrequieto, estarão muito pesadas para escapar às perseguições do anticristo. Outras, tendo apenas degustado os mistério da fé e embebidas somente de uma fraca dose de ciência divina, não terão força suficiente e habilidade necessário para resistir a tão grandes assaltos” (Santo Hilário de Poitiers, Comentários sobre o Evangelho de São Mateus, 25. 6).

SÃO GREGÓRIO DE TOURS

Concerning the end of the world, I believe what I have learnt from those who have gone before me. Antichrist will assume circumcision, asserting himself to be the Christ. He will then place a statue to be worshipped in the Temple at Jerusalem, as we read that the Lord has said, ‘Ye shall see the abomination of desolation standing in the holy place’.” (from the writings of Gregory of Tours)

                                                      SULPÍCIO SEVERO

“But when we questioned him concerning the end of the world, he said to us that Nero and
Antichrist have first to come; that Nero will rule in the Western portion of the world, after having subdued ten kings; and that a persecution will be carried on by him, with the view of compelling men to worship the idols of the Gentiles. He also said that Antichrist, on the other hand, would first seize upon the empire of the East, having his seat and the capital of his kingdom at Jerusalem; while both the city and the temple would be restored by him.” (Sulpitius Severus, Dialogue II. Concerning the Virtues of St. Martin. Dialogues of Sulpitius Severus. Chapter XIV)

 


                                                          SANTO AGOSTINHO DE HIPONA

Em que templo de Deus se sentará? Não sabemos se nas ruínas do templo de Salomão ou na Igreja. É claro que o Apóstolo não chamaria templo de Deus ao templo de algum ídolo ou do demônio. Por isso alguns pretendem que essa passagem que fala do anticristo não se refira ao príncipe, mas a seu corpo todo, ou seja, à multidão de homens que lhe pertencem, com ele à cabeça. E acham mais correto seguir o texto grego e não dizer em latim in templo Dei (no templo de Deus), na in templum Dei sedeat (tome assento dentro do templo de Deus)”(S. Agostinho, A cidade de Deus, c. XIX, ed. Vozes, p. 455)

“Outros, porém, acham que tanto estas palavras: ‘já sabeis a causa que o detém, como estas: já começou a operar-se o
mistério da iniqüidade, se referem unicamente aos maus e aos hipócritas existentes na Igreja, até formarem número capaz de constituir o povo do anticristo. É, dizem eles, ao que chama mistério de iniqüidade, porque é coisa oculta. Essas outras palavras seriam exortação do Apóstolo aos fiéis para perseverarem firmes na fé: Só que aquele que agora se mantém se mantenha em pé até ser tirado do meio, quer dizer, até sair da Igreja o mistério de iniqüidade agora oculto. E acreditam aludirem a esse mistério aquelas palavras do evangelista São João em sua epístola: Filhos, está já é a última hora e, como haveis ouvido que há de vir o anticristo, assim agora muitos se fizeram anticristos. Isso faz-nos perceber que já é a última hora. Saíram de nós, mas não eram dos nossos, pois, se fossem dos nossos, haveriam sem dúvida, perseverado conosco. Assim como, dizem eles, antes do fim, antes dessa hora que São João chama a última, já saíram da Igreja muitos hereges, pelo Apóstolo chamados anticristos, assim também todos os não pertencentes a Cristo, mas ao anticristo, então sairão e se manifestarão.” (S. Agostinho, A cidade de Deus, c. XIX, ed. Vozes, p. 456)

SÃO GREGÓRIO MAGNO

"por uma terrível e misteriosa disposição de Deus", antes do aparecimento do Anticristo,"ficarão subtraídos da Igreja, os milagres e os prodígios". "Se esconde a profecia, desaparece a graça das curas, diminui a virtude de larga abstinência, calam as palavras de doutrina, são excluídos todos os prodígios milagrosos". Não é que a providência elimine completamente essas coisas,"mas não as deixará ver com freqüência e claridade dos tempos do Anticristo". Isto, Deus os permite, para que nas dificuldades resplandeça mais a virtude dos bons, privada esta "de quase toda multidão e manifestação dos milagres". Estes não faltarão, mas em comparação como os que fará Satanás parecerão "pouco ou nada" (S. Gregório Magno, Moralia in Job, XXXIX, 7, PL 76; Fonte: Los carismas en la Iglesia, Domenico Grasso, ediciones Cristiandad.








SÃO CESÁRIO DE ARLES

Seus pés se pareciam ao bronze fino incandescido na fornalha’. (Ap 1, 15). Os pés incandescidos significam que a Igreja, ante a iminência do dia do juízo há de ser provada com abundantes perseguições e julgada pelo fogo. E dado que o pé é a parte extrema do corpo, se diz que os pés estás incandescentes, pelos pés devemos entender a Igreja dos últimos tempos, que será provada, como o ouro na fornalha, com muitas tribulações.” (São Cesário de Arles, Comentario al Apocalipsis. Madrid: Editorial Ciudad Nueva, 1994, p. 27)
Nós temos escutado, irmãos queridos, na leitura que acaba de ser recitada: 'Naquela hora sobreveio um grande terremoto' (Ap 11,13). Aquele terremoto significa a perseguição que o diabo costuma a exercer por meio dos homens maus. ‘E caiu uma décima parte da cidade e pereceram no terremoto sete mil pessoas.’ O número dez e o sete são números perfeitos; porque se assim não fosse, haveríamos de entender o todo pela parte. Com efeito, na Igreja existem dois edifícios: um edificado sobre a rocha, e o outro sobre a areia; o que está sobre a areia é o que se diz que se derruba. ‘As demais, aterrorizadas, deram glória ao Deus do céu.’ Os que davam glória a Deus são aqueles que estão cimentados sobre a rocha e os que haviam perecido são os que estavam sobre a areia.” (São Cesário de Arles, Comentario al Apocalipsis. Madrid: Editorial Ciudad Nueva, 1994, p. 83)
E posto que existe duas partes na Igreja, quer dizer a dos bons e a dos maus, deste modo uma parte é castigada para que se corrija e a outra é abandonada a suas voluptuosidades. A parte dos bons é entregue a humilhação para conhecer a justiça de Deus e recordar o dever da penitência” (São Cesário de Arles, Comentario al Apocalipsis. Madrid: Editorial Ciudad Nueva, 1994, p. 73)

“nos tempos do Anticristo, o reino da besta será mesclado com a variedade de nações e povos”
(São Cesário de Arles, Comentario al Apocalipsis. Madrid: Editorial Ciudad Nueva, 1994, p. 92)


O ANTICRISTO NOS TEÓLOGOS E SANTOS MEDIEVAIS


ALCUÍNO

“Como si dijera: he venido al mundo para que el nombre de mi Padre sea glorificado por mí, puesto que todo lo atribuyo al Padre. Como no tenían amor de Dios, no querían recibir a Aquél que venía a hacer la voluntad del Padre. Mas el Anticristo vendrá, no en el nombre del Padre, sino en el suyo propio, y no buscando la gloria del Padre, sino la suya. Y como
los judíos no quisieron recibir a Jesucristo, se les castigará su pecado con mucha razón, haciéndoles que reciban el Anticristo, para que los que no quisieron creer en la verdad crean en la mentira”. (Alcuíno, apud Catena Áurea de São Tomás de Aquino, Jn 5,41-47)



SÃO TOMÁS DE AQUINO


“Estabelece logo (o apóstolo) a verdade, a dizer: "Ninguém, de nenhum modo, vos engane, porque isto não acontecerá sem que primeiro venha a apostasia e seja revelado o homem da iniqüidade” (II Tessalonicenses 2:1-3) (SÃO TOMÁS DE AQUINO - COMENTARIO A LA SEGUNDA EPÍSTOLA A LOS TESALONICENSES - Lección 1: 2 Tesalonisenses 2,1-5)


“entenda-se a apostasia ou separação do Império Romano, a quem todo mundo estava submetido(...) Mas como pode ser isto, sendo que já se passaram muitas centúrias desde que os gentios se apartaram do Império Romano, e, todavia, o Anticristo ainda não veio. Digamos que o Império Romano ainda segue de pé, mas mudada sua condição temporal em espiritual, como disse São Leão papa em um sermão sobre os apóstolos. Por conseguinte, a separação do Império Romano há de entender-se, não somente na ordem temporal, senão também espiritual, a saber: da fé da Igreja Romana. E este é um sinal significativo, pois assim, como Cristo veio quando o Império Romano senhoreava sobre todas as nações, assim, ao contrário, o sinal do Anticristo é a separação ou apostasia dele (isto é, da fé da Igreja Romana)
(SÃO TOMÁS DE AQUINO - COMENTARIO A LA SEGUNDA EPÍSTOLA A LOS TESALONICENSES - Lección 1: 2 Tesalonisenses 2,1-5)

(...) da mesma maneira, em todas as perseguições que a Igreja sofreu, os tiranos foram como figura do Anticristo, em que ele estava latente; e assim, toda aquela malícia, que estava escondida neles, se fará patente no tempo do Anticristo (...) (SÃO TOMÁS DE AQUINO - COMENTARIO A LA SEGUNDA EPÍSTOLA A LOS TESALONICENSES - Lección 1: 2 Tesalonisenses 2,1-5)


(...) Assim, o Anticristo...se sentará no templo. Mas em que templo? Acaso não foi este destruído pelos Romanos? Por isso, alguns dizem que o Anticristo é da tribo de Dan, que não se nomeara entre as outras (Ap 12, 7); e por isso, também os judeus o receberão primeiro, e reedificarão o templo em Jerusalém, e assim se cumprirá a profecia de Daniel: “e estará no templo a abominação da desolação” (Mt 27, 24). Mas alguns dizem que nunca será reedificada Jerusalém, senão que durará a desolação até a consumação e fim do mundo. Crença também admitida por alguns judeus; por isso, a explicação que dão “no templo de Deus” se refere a Igreja, por que muitos eclesiásticos receberão o Anticristo.”
(SÃO TOMÁS DE AQUINO - COMENTARIO A LA SEGUNDA EPÍSTOLA A LOS TESALONICENSES - Lección 1: 2 Tesalonisenses 2,1-5)


HILDEGARDE VON BINGEN

Quanto ao clero, Hildegard Von Bingen assevera:"(...) sua honra perecerá e a coroa cairá de sua cabeça.(...) Desse modo, os atos ruins da humanidade serão purgados através de tribulação e contrição, e muita dor será imposta àqueles que através de seus atos irreligiosos, trazem miséria aos outros." (Hidegarde, Letter 57. Hildegardis Bingensis. Oxford University Press, 2006)







Hidegarde na visão de número 11 - Os últimos dias e a queda do Anticristo



"A figura de uma mulher que eu tinha visto previamente na frente do altar que está diante dos olhos de Deus; ela estava no mesmo lugar, mas agora eu a via da cintura para baixo. E da cintura até o lugar que denota o sexo feminino, ela tinha várias manchas escamosas e no lugar de suas partes privadas, havia uma cabeça negra monstruosa. E esta cabeça tinha olhos ardentes, e orelhas como de um jumento, e nariz e boca como os de um leão. E ela abriu sua boca mostrando terríveis dentes de ferro que rangiam uns nos outros." (Hildegardis Bingensis. Scivias. Turnhout, Bélgica: Brepols, 1978)

Na acertada interpretação de Barbara Newman, a cabeça designa o Anticristo, com seus atos viciosos, doutrinas, e perseguições. Ela aparece onde estão os genitais da imagem como um símbolo de que seu intuito é seduzir a Igreja assim como o demônio corrompeu Eva. Na ilustração correspondente à visão, a Igreja é representada como uma grotesca imagem hermafrodita, onde as orelhas do jumento assumem a forma de um falo ereto sugerindo a tentativa de estupro da virgem de Cristo, que significa espoliação sofrida pela Igreja pelas mãos dos prelados corruptos. Mas Hildegarde viu também a figura de Cristo, o qual estava vestido com uma túnica púrpura. E ela viu que, no lugar que denota o sexo masculino,
ele brilhava como a aurora. Mas deixemos que a própria Hildegard interprete a sua visão ( ela o fará assumindo a voz de Deus):
"Todas as coisas que estão na terra correm para o seu fim, e o mundo gira em direção ao fim, oprimido pelo enfraquecimento de suas forças e suas muitas tribulações e calamidades. Mas a Noiva do meu Filho, muito preocupada com seus filhos tanto por causa dos precursores do filho da perdição como devido ao próprio destruidor, nunca será esmagada, não importa o quanto seja atacada. E no fim dos tempos, ela se erguerá mais forte do que nunca, e será mais bonita e gloriosa; e então ela se moverá doce e deliciosamente para os abraços de seu Amado." (Hildegardis Bingensis. Scivias. Turnhout, Bélgica: Brepols, 1978)



SÃO VICENTE FERRER


"São Vicente Ferrer em seu sermão de 10 de março de 1404, em Friburgo, anuncia que o agente de satã irá seduzir os fiéis, com dinheiro, com promessas, falsos milagres, argumentos filosóficos, e, em seguida, torturar suas vítimas." (MINOIS, Georges, Storia del riso e della derisione, Volume 54 de Storia e civiltà, Edizioni Dedalo, 2004,p.295. Cf. FAGES, H. Histoire de Saint Vincent Ferrier. Louvain-Paris:1901-1905)

"De início ele vos tomará todos os bens temporais. Depois, matará as crianças e os amigos na presença dos pais. Em seguida, cada hora, cada dia, ele vos arrancará um membro depois do outro, não de forma contínua, mas pouco a pouco." (MINOIS, Georges, Storia del riso e della derisione, Volume 54 de Storia e civiltà, Edizioni Dedalo, 2004,p.295. Cf. FAGES, H. Histoire de Saint Vincent Ferrier. Louvain-Paris:1901-1905)



O ANTICRISTO NA EXEGESE CONTEMPORÂNEA



CARDEAL NEWMAN

"Nos tempos do Anticristo, a Igreja de Deus sobre a terra, como bem podemos imaginar, verá fortemente reduzido o número aparente de seus fiéis, em razão da deserção dos poderes deste mundo. Esta deserção começará por uma indiferença a toda forma de cristianismo, sob a aparência de tolerância universal. Mas tal tolerância não procederá de um verdadeiro espírito de caridade e indulgência, mas de um desígnio de minar o cristianismo pela multiplicação e o fomento das seitas. Essa pretensa tolerância irá muito além de uma justa tolerância, inclusive no que toca às diferentes seitas de cristãos. Pois os governos pretenderão ser indiferentes a todas e não darão proteção preferencial a nenhuma. Todas as Igrejas estabelecidas serão deixadas de lado. Da tolerância das mais terríveis heresias passarão logo à tolerância do islamismo, do ateísmo e, por fim, à perseguição explícita da verdade do cristianismo". (John Henry Newman, In Four Lectures, II. The Patristical Idea of Antichrist. Lecture 1. The Times of Antichrist)





SANTO ANTÔNIO MARIA DE CLARET

"À exceção de muito poucos, todos os fiéis em breve tempo perderão a fé e a caridade, verificando-se então a apostasia quase geral de que fala o Apóstolo em sua segunda carta aos de Tessalônica: 'Porque isto [o Dia do Senhor] não acontecerá sem que primeiro venha a apostasia e seja revelado o homem da iniquidade, o filho da perdição'" (2Ts 2-3) (La Época presente considerada como probablemente la última del mundo, segun los datos que sobre estas cosas nos suministran las Santas Escrituras, los Santos Padres, y expositores de aquellas, Santo Antonio Maria Claret, Editora Libr. Religiosa, 1857, p. 47)

"Já vão fundindo-se e consolidando-se o indiferentismo, o racionalismo e o sensualismo...a insubordinação, a rebelião, o comunismo, a injustiça, a tirania, a crueldade, a morte... muitas dessas peças que devem compor a infernal máquina do Anticristo, se encontram perfeitamente cultivadas" (La Época presente considerada como probablemente la última del mundo, segun los datos que sobre estas cosas nos suministran las Santas Escrituras, los Santos Padres, y expositores de aquellas, Santo Antonio Maria Claret, Editora Libr. Religiosa, 1857, p.24)

"Diz o sagrado texto que os apóstatas levarão em sua fronte e em suas mãos o nome ou a marca da besta, para denotar a publicidade e o descaramento com que professarão o anticristianismo. As mãos e a fronte são o que há de mais visível e público no homem, e ao mesmo tempo são os dois símbolos mais expressivos do modo de obrar, o primeiro, e do modo de pensar, o segundo."
(La Época presente considerada como probablemente la última del mundo, segun los datos que sobre estas cosas nos suministran las Santas Escrituras, los Santos Padres, y expositores de aquellas, Santo Antonio Maria Claret, Editora Libr. Religiosa, 1857, p.72-73)

"Como a fé de todos aqueles miseráveis serão uma fé adormecida, ou melhor, morta, esquecidos totalmente de Cristo e das máximas de Seu Evangelho, todas as suas máximas, todos os seus pensamentos, todos os seus afetos e desejos serão carnais, mundanos, terrenos, segundo indica a procedência da segunda besta."
(La Época presente considerada como probablemente la última del mundo, segun los datos que sobre estas cosas nos suministran las Santas Escrituras, los Santos Padres, y expositores de aquellas, Santo Antonio Maria Claret, Editora Libr. Religiosa, 1857, p.68-69)

"Aprovando esta prática a infernal conduta da primeira besta, aconselhará a todos, pública e privadamente, que se acomodem as circunstâncias do tempo pelo bem da paz, duma falsa e maldita paz. Jesus Cristo em tais casos não quer paz, senão guerra, e ele mesmo diz que nos trouxe a guerra, e que por bem dessa paz tomem em suas mãos e em sua fronte a marca da besta, isto é, que se declarem por ela. Assim, o farão muitos, apostatando covardemente, mas os fiéis bem instruídos em seus deveres contestarão com valor e ousadia"
(La Época presente considerada como probablemente la última del mundo, segun los datos que sobre estas cosas nos suministran las Santas Escrituras, los Santos Padres, y expositores de aquellas, Santo Antonio Maria Claret, Editora Libr. Religiosa, 1857, p.69)


DR. ÁNGEL MIRETE PINA
"Este homem de pecado é identificado por alguns com o Anticristo, com maiúscula, como escreve J. M. Bover, para quem 'é, segundo o sentir dos Santos Padres e teólogos, uma pessoa, não uma coletividade ou instituição ou tendência personificada, como tem pretendido alguns modernos: ainda que, claro está, a pessoa do Anticristo concentrará em si e representará uma tendência e uma coletividade. Esta tendência parece, será um ateísmo militante e comunista, mais radical e exacerbado do que até agora se conheceu, encarnado numa personalidade irresistívelmente fascinadora e avassaladora e satânicamente orgulhosa, frente a qual resultaría pálida a figura de um Lênin.' " (DR. ÁNGEL MIRETE PINA, 666. APOCALIPSIS I A XIII: UNA PROFECÍA CUMPLIDA, ED. ENCUENTRO, 1998, p. 70-71)

PADRE J.M. IRABURU
Cristo salva aos homens através da pregação da verdade. Ele veio ao mundo “para dar testemunho da verdade” (Jo 18,37). Ele que “que todos os homens se salvem, e cheguem ao conhecimento da verdade”(1Tm 2,4). Cristo sabe que Ele é “a Verdade” (Jo 14,6), a luz do mundo, e que quem o segue “não anda nas trevas” (Jo 8,12). E pede: Pai, “santifica-os na verdade” (17,7), quer dizer, santifica-os por obra do Espírito Santo, que é o “Espírito da Verdade” (16,13). Sabe Cristo que somente “a verdade vos fará livres” (8,22) do demônio, do mundo e da carne. Portanto, todo silenciamento da verdade da fé que nos salva impede ou dificulta a salvação dos homens. É algo gravíssimo.”
O Pe. J. M. Iraburu observou em alguns artigos, que nas pregações atuais existe um silenciamento crônico: sobre salvação ou condenação, sobre pudor, sobre a pregação de conversão nas missões, sobre o adultério, sobre o demônio e exorcismos, sobre a vida cristã como batalha contra o diabo e vitória total de Cristo na parusia. E diz:
É evidente que uma verdade de fé silenciada em forma absoluta durante largo tempo equivale a uma negação da mesma. E que, portanto, a causa principal da apostasia crescente entre os cristãos é precisamente o silenciamento de muitas verdades fundamentais do Evangelho."
Segundo Iraburu, o silenciamento de verdades fundamentais do Evangelho conduz o povo católico a apostasía da fé. A raiz deste silêncio são as falsas doutrinas ensinadas nos seminários: "O silenciamento de tantas verdades fundamentais da fé católica se deve principalmente a doutrina falsa que se inculca nos seminários com não escassa freqüência.”
Outro fator que leva ao silenciamento é a falta de fé, afirma o sacerdote: "Eu cri, por isto falei (Sl 115,1), também nós cremos, e por isso falamos." (2Cor 4,13). Pelo contrário, «não cremos e, por isso, não falamos». Os silenciamentos sistemáticos de tantas verdades da fé católica estão indicando que muitos sacerdotes e fiéis não crêem mais nos mistérios revelados por Dios e ensinados pela Igreja.
Iraburu ainda afirma que "Sem esperança, sem esperança teologal, os males da humanidade e da Igreja não tem remédio". Ele bem observa que "Faltam hoje em nossa Igreja homens audazes na esperança. Muitos, inclusive entre os melhores, se resignam a uma Igreja sempre decrescente, reduzida a um Resto, e a um Resto dividido, em que há as vezes mais erros que verdades, e mais rebeldias que obediências. Pois, bem, sem estes homens de esperança não haverá reforma, não a concederá o Senhor, e sem reforma, prosseguirá crescendo a apostasia. Todos os males da Igreja, doutrinas falsas, abusos disciplinares, são perfeitamente remediáveis, pois Deus ama a Igreja, a Esposa do Filho, e é Onipotente." (Fonte: Blog do Pe. J.M.Iraburu, reforma ou apostasia)






RENÉ GIRARD


O que significa Anticristo? Significa que haverá uma imitação de Cristo, como uma paródia. Descreve-se um mundo exatamente como o nosso, no qual aqueles que mais perseguem o fazem em nome da luta contra a perseguição” (RENÉ GIRARD, Quand ces choses commenceront, transcrição de uma longa entrevista de René Girard)

O mecanismo do bode expiatório, de acordo com o filósofo René Girard, absolve os sacrificadores e culpabiliza a vítima, continuamente. Se o cristão sincero, em obediência a Cristo, precisa se responsabilizar pelo mal que lhe cabe, o espírito do anticristo pede que seus seguidores desloquem toda culpa para fora de si: eis o motor maior da violência que culmina nas perseguições e nos totalitarismos.


JOSEP PIEPER
"No mesmo instante em que se faça possível o domínio universal em sentido pleno, também será realmente possível o Anticristo." (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998.p.127)

"Uma organização mundial poderá trazer a mais funesta e insuperável de todas as tiranias com o estabelecimento definitivo do reinado do Anticristo" (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998.p.127)

"O Estado mundial do Anticristo será um Estado totalitário num sentido extremo." (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998.p.128)

"A potentia saecularis, o poder mundano, seria segundo afirma Tomás de Aquino, o verdadeiro instrumento do Anticristo" (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998.p. 125)


3. Y una vez más nos preguntamos:
¿qué sentido tiene la representación del reinado del Anticristo como estado final intrahistórico?Se dice ante todo, per negationem, que el verdadero tema de la historia universal no es simplemente, en fórmula de Goethe, la fe y la incredulidad y la lucha entre ambas, sino que de una manera mucho más concreta ese tema es la lucha en torno a Cristo. Si realmente la figura que domina el escenario de la historia al final del tiempo es el Anticristo, quiere decirse que el actor principal de la época última es inequívocamente un personaje referido a Cristo. (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)


(...) el Anticristo es una manifestación del campo político. No es algo parecido a un hereje, a un disidente, que sólo tenga importancia dentro de la historia de la Iglesia mientras que el resto del mundo no necesita tener noticias de él.
La potentia saecularis, el poder mundano sería -según lo afirma Tomás de Aquino- el verdadero instrumento del Anticristo, que es por esencia alguien dotado de poder. Los tiranos y gobernantes violentos, que persiguen a la Iglesia serían -y continuamos citando al Aquinatense- los representantes (quasi figura) del Anticristo. (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)

A éste, pues, no se le concibe al margen del terreno histórico, sino que más bien es una figura eminentemente histórica, toda vez que la historia es primordialmente historia política. Con ello se dice simultáneamente otra cosa, a saber: que el fin no ocurrirá en el sentido de un caos, en el que una multitud de potencias históricas se enfrentan entre sí, llegando paso a paso por ese camino a una disolución general de los entramados y estructuras, produciendo al final una especie de descomposición. (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)

Sino que al final habrá una figura soberana dotada de un poder inaudito, y que bien mirado no establece un verdadero orden.
Al final de la historia se impondrá un pseudo-orden sostenido por un abuso de poder. (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)

La designación de "pseudo-orden" es también atinente en el sentido de que tiene éxito el "engaño", siendo desde luego un elemento de la profecía sobre el fin el que la "desolación del orden" del Anticristo se considere como un verdadero y auténtico orden. (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)

Tal vez el pseudo-orden del reinado del Anticristo después de un tiempo de "desórdenes" en grado máximo, como los que según el sentir de Toynbee suelen proceder al establecimiento de un Estado universal, será saludado como una liberación (con lo que una vez más se confirmaría precisamente el carácter del Anticristo como un Pseudo-Cristo).
(PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)

Otro de los rasgos que se ha de atribuir al Anticristo es el de una figura,
cuyo poder político se extiende a toda la humanidad... (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)

Es el señor del mundo.
En el mismo instante en que se haga posible el dominio universal en sentido pleno, también será realmente posible el Anticristo. (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)

A ello responde el otro estado de cosas inherente:
el mensaje cristiano llegará a conocimiento de la totalidad de los pueblos de la tierra políticamente colonizados: "Este evangelio del reino será predicado en toda la tierra como testimonio para todos los pueblos; y entonces llegará el fin" (Mt, 24, 14). Esto teología no lo entiende en el sentido de que la religión cristiana tenga que reportar una victoria sobre el mundo, sino como un estado de cosas en que será posible (y hasta apremiante) tomar una decisión a favor o en contra de Cristo en toda la faz del planeta. (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)


La constitución de un Estado universal, como la que pareció intentarse con un alcance histórico en los años posteriores a la segunda Guerra Mundial, puede muy bien convertirse algún día en un legítimo objetivo de la actividad política. (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)


Se ha dicho, por lo demás, que con ello la humanidad entrará en un nuevo "estado de agregación", en un estado en que el reinado del Anticristo resulta posible y en un sentido incomparablemente agudo:
"una organización mundial podría traer la más funesta e insuperable de todas las tiranías con el establecimiento definitivo del reinado del Anticristo" (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)


El Estado mundial del Anticristo será un Estado totalitario en un sentido extremo. (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)

En el famoso Relato del Anticristo -que pretende reproducir todo "cuanto con la mayor verosimilitud se puede decir sobre este tema de acuerdo con la Sagrada Escritura, la tradición de la Iglesia y la sana razón humana"- Vladimir Soloviev traza la leyenda del
Anticristo como "el gran espiritualista, asceta y amigo de los hombres", cuya altísima autoestimación aparece justificada por las "supremas manifestaciones de continencia, abnegación y activa disposición de ayuda"; y es "por encima de todo un amigo de los hombres, y no sólo de los hombres, sino también amigo de los animales, siendo personalmente vegetariano". (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)

El Anticristo del relato de Soloviev es autor de un libro, traducido a todas las lenguas del mundo, con el título de El camino abierto a la paz y al bienestar en todo el mundo. Ha "creado en toda la humanidad una semejanza firmemente fundada: la semejanza de una hartura universal". Y después de haber sido proclamado -sobre la base de una elección sin votación- soberano del mundo, el Anticristo pronuncia un manifiesto, que concluye con las palabras siguientes: "¡Pueblos de la Tierra! ¡Se han cumplido las promesas! La paz del mundo está asegurada por toda la eternidad. Cualquier intento de destruirla encontrará al instante una resistencia insuperable, pues que desde hoy no existe sobre la tierra más que un único poder central... Ese poder me pertenece... El derecho internacional posee al fin la sanción que hasta ahora le ha faltado. De ahora en adelante ningún poder osará decir "guerra" cuando yo diga "paz". ¡Pueblos de la Tierra! ¡ La paz sea con vosotros!". Esto lo escribía Soloviev el último año del siglo XIX.
(PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)

"Así como en los días de Jesús de Nazaret se hicieron amigos Herodes y Pilato, fariseos y saduceos, porque se trataba de ir contra Cristo, así también en los días del Anticristo se unirá contra la Iglesia todo lo que se llama mundo". El "enemigo del mundo" será la Iglesia. (PIEPER, Josep. El fin del tiempo. Meditación sobre la filosofía de la historia. Barcelona: Ed. Herder, 1998)


PADRE JOSÉ ARTULINO BESEN

O amor de Deus foi derramado em nossos corações pelo seu Espírito que habita em nós (Rm 5,5).
Lembro aqui duas notícias publicadas na imprensa: Prova de laço e missa campeira são destaques: "Na missa campeira para a Nossa Senhora Aparecida, os peões e prendas pediram a bênção da santa. Parados na frente do altar, em cima dos cavalos, eles solicitaram proteção para as competições" (DC, 2/5/2007, p. 24). "Se Jesus Cristo fosse vivo, ele não diria aos fiéis que "o reino de Deus é como um tesouro escondido", e sim "o reino de Deus é como ganhar sozinho na loto". "É emoção." Confissão deve ser Reencontro, pois "Confissão é coisa de bandido. É uma dádiva poder escutar o que aflige o fiel e como ele batalha contra as tentações do pecado. As confidências são o feedback. Isso é pesquisa qualitativa". (Afirmações do fundador da Associação Brasileira de Marketing Católico –ABMC (Isto É, 9 de maio, 2007). Esse tipo de anúncio ao gosto do freguês e de uma pastoral acomodadora, agradável a qualquer preço, faz lembrar o personagem Anticristo, do filósofo, teólogo e escritor russo Vladimir Soloviev (1853-1900), que faz o Anticristo se auto-anunciar servindo-se das palavras do próprio Jesus: "Eu vim em nome de meu Pai e vós não me acolhestes; virá um outro em seu próprio nome e vós o acolhereis: sou eu". E depois conclui: "Para ser acolhido é necessário ser agradável". O Anticristo de Soloviev encontra solução para tudo: ecumenismo, justiça, bem-estar, salvação, diálogo religioso, tudo se resolve de modo agradável, evitando dores, esforços longos e oferta da inteligência ao Espírito. Poucos resistiram ao seu fascínio irresistível e foram julgados fanáticos: enfim, o mundo tem jeito, e sem sacrifícios.Bem diferentes as palavras de Bento XVI no Brasil e que causaram alvoroço, pois o Papa poderia estar afastando fiéis com sua pregação exigente dos valores evangélicos. Ao defender a família como célula-mãe da sociedade, a vida em todos os estágios, Bento XVI afirma que "a Igreja quer apenas indicar os valores morais de cada situação e formar os cidadãos para que possam decidir consciente e livremente". Não há imposição, pois a consciência é o tribunal indevassável de cada pessoa, o que não exclui que seja formada corretamente e, no caso dos cristãos, segundo a Palavra de Deus. Bento XVI, teólogo refinado, não tem saudades do passado. Ele quer uma Igreja consciente, cristãos bem formados em todos os níveis da sociedade civil. No discurso de abertura da V Conferência de Aparecida lamentou a precariedade de líderes católicos nos meios científicos e políticos. Ele quer dizer a todos: trabalhem mais, sejam mais e melhores pastores e o rebanho permanecerá unido. Ao mesmo tempo, não tem saudades dos números, da grande estatística; o que mede a força do cristianismo é a intensidade de vida, de encontro com o Senhor, de cada pessoa e de cada comunidade. Recorde-se aqui uma palavra sua quando ainda Cardeal, numa entrevista: ''A Igreja diminuirá de tamanho. Mas dessa provação sairá uma Igreja que terá extraído uma grande força do processo de simplificação que atravessou, da capacidade renovada de olhar para dentro de si. Porque os habitantes de um mundo rigorosamente planificado se sentirão indizivelmente sós. Descobrirão, então, a pequena comunidade de fiéis como algo completamente novo. Como uma esperança que lhes cabe, como uma resposta que sempre procuraram secretamente" (O Sal da Terra).Papa Ratzinger anuncia um cristianismo sério, pois "o cristianismo é obra de grandeza", nas palavras Inácio de Antioquia. Quanto menos o mundo quiser ouvir falar de Cristo, mais dele estará precisando. Cristo, porém, não veio para facilitar a vida, mas para torná-la divina, o que exige contínuo combate espiritual e não o espetáculo religioso. Na sociedade de consumo, hedonista, ser agradável é tudo o que se espera. Vale a pena simplificar ou falsear a mensagem do Crucificado descendo ao mesmo chão? (Fonte: Seleção "Tema Pastoral"JORNAL DA ARQUIDIOCESE DE FLORIANÓPOLIS - Junho/2007; Publicação autorizada * Autor: Pe. José Artulino Besen historiador eclesiástico, professor de História da Igreja no Instituto Teológico de Santa Catarina – ITESC desde 1975 e pároco)


CARDEAL BIFFI E SOLOVIEV

ROMA, 3 de junho de 2005 – O cardeal Giacomo Biffi, 77 anos, arcebispo de Bologna de 1984 a 2003, teólogo e grande estudioso de santo Ambrósio, reuniu num volume publicado nestes dias por Cantagalli alguns dos seus escritos não especificamente teológicos. Título do volume: “Pinocchio, Peppone, o Anticristo e outras divagações” O Anticristo, a que se refere o título, é aquele descrito pelo filósofo e teólogo russo Vladimir Sergeevic Soloviev no seu último livro escrito pouco antes da sua morte, em 1900: “Os três diálogos e a narrativa do Anticristo”. Por que o cardeal Biffi quer repropô-lo hoje à atenção de todos? Porque – escreve ele – “Soloviev preanunciou com lúcida previsão a grande crise que atingiu o cristianismo nas últimas décadas do século XX”.Na figura do Anticristo descrito por Soloviev, de fato, Biffi reconhece o “o “símbolo da religiosidade confusa e ambígua do tempo em que hoje vivemos”. Vê descritos e criticados o “cristianismo dos valores”, a enfatização das “aberturas”, a obsessão do “diálogo” a qualquer custo, “onde parece que pouco resta da pessoa única e inconfrontável do Filho de Deus crucificado por nós, ressuscitado, hoje vivo. É a situação que dom Divo Barsotti denunciou com tremenda frase e tremendamente verdadeira quando disse que nos nossos dias no mundo católico Jesus Cristo muito freqüentemente é só uma desculpa solo para falar do outro”. Na narrativa de Soloviev, o Anticristo primeiramente é eleito Presidente dos Estados Unidos da Europa, depois aclamado imperador em Roma, se apossa do mundo todo, e no fim se impõe também à vida e à organização das Igrejas. Mas não é tanto sobre esses fatos que o cardeal Biffi chama a atenção, mas quanto às características da personagem. Eis que, repentinamente – em algumas passagens do seu trabalho que, no entanto, exige ser lido na sua íntegra – como o cardeal o resume e como tira deste uma lição para a Igreja de hoje: 

  
O Anticristo era – diz Soloviev – “um espiritualista convicto”. Acreditava no bem e até em Deus. Era um asceta, um estudioso, um filantropo. Dava “altíssimas demonstrações de moderação, de desinteresse e de ativa beneficência”. Na sua primeira juventude se destacara como douto e arguto exegeta: uma sua volumosa obra de crítica bíblica lhe havia propiciado um diploma de honra na universidade de Tubinga.
Mas o livro que lhe dera fama e consenso universal leva o título: “O caminho aberto para a paz e a prosperidade universal”, onde “se unem o nobre respeito às tradições e símbolos antigos com um vasto e audaz radicalismo de exigências e diretivas sociais e políticas, uma liberdade sem limites de pensamento com a mais profunda compreensão de tudo aquilo que é místico, o absoluto individualismo com uma ardente dedicação ao bem comum, o mais elevado idealismo com princípios e diretivas com a precisão completa e a vitalidade das soluções práticas”. É verdade que alguns homens de fé se perguntavam por que nenhuma vez fora pronunciado o nome de Cristo; mas os outros replicavam: “Uma vez que o conteúdo do livro se encontra permeado do verdadeiro espírito cristão, do amor ativo e da boa disposição universal, o que vocês querem mais?”.Por outro lado, ele “não tinha por Cristo uma hostilidade de princípio”. Pelo contrário, reconhecia a reta intenção e o elevadíssimo ensinamento.
Porém, três coisas de Jesus lhe eram inaceitáveis. Antes de tudo as suas preocupações morais. “Cristo – afirmava ele – com o seu moralismo dividiu os homens segundo o bem e o mal, enquanto eu os unirei com os benefícios que são igualmente necessários aos bons e aos ruins”. Depois não aceitava “a sua absoluta unicidade”. Ele é um dos tantos; ou melhor, dizia, foi o meu precursor, porque o salvador perfeito e definitivo sou eu, que purifiquei a sua mensagem daquilo que é inaceitável ao homem de hoje. Finalmente, e principalmente, não podia suportar o fato que Cristo estivesse vivo, tanto que histericamente repetia: “Ele não está entre os vivos e nunca estará. Não ressuscitou, não ressuscitou, não ressuscitou. Ele apodreceu, apodreceu no sepúlcro...”.Mas onde a exposição Soloviev se mostra mais especialmente original e surpreendente – e merece a mais profunda reflexão é atribuir ao Anticristo os qualificados de pacifista, de ecologista, de ecumenista. [...] Nesta descrição do Anticristo Soloviev teve algum objetivo concreto? É inegável que ele alude ao “novo cristianismo” do qual naqueles anos Lev Tolstoj tornou-se eficiente divulgador. [...] No seu “Evangelho” Tolstoj reduz todo o cristianismo a cinco regras de comportamento que ele deduz do Sermão da Montanha:

1. Não só se deve não matar, mas nem mesmo se deve zangar-se com o irmão..
2. Não se deve ceder à sensualidade, de tal modo que não se deve desejar nem mesmo a própria esposa.
3. Nunca se deve vincular-se a juramento.
4. Não se deve resistir ao mal, mas sim aplicar até o extremo e sempre o princípio da não-violência.
5. Ame, ajude e sirva o teu inimigo.

Estes preceitos, segundo Tolstoj, de fato vem de Cristo, mas para permanecerem válidos, de fato, não têm necessidade da existência atual do Filho de Deus vivo. [...] Evidentemente, Soloviev não identifica materialmente o grande romancista com a figura do Anticristo. Mas intuiu com extraordinária clarividência que justamente o próprio tolstoismo, ao longo do século XX, seria o veículo do esvaziamento substancial da mensagem evangélica, sob a formal exaltação de uma ética e de um amor para a humanidade que se apresenta como “valores cristãos”. [...] Virão dias, nos diz Soloviev – ou melhor, já vieram, dizemos nós – quando na cristandade se tenderá a dissolver o fato salvífico, que só pode ser aceito por ato difícil, corajoso concreto e racional da fé, numa série de “valores” facilmente trocados nos mercados mundanos. Deste perigo – nos alerta o maior filósofo russo – nós devemos nos precaver. Ainda que um cristianismo tolstoiano nos tornasse infinitamente mais aceitáveis nos ambientes, nas agregações sociais e políticas, nas transmissões televisivas, não podemos e não devemos renunciar o cristianismo de Jesus Cristo, o cristianismo que tem no seu centro o escândalo da cruz e a realidade perturbadora da ressurreição de Nosso Senhor. Jesus Cristo, o Filho de Deus crucificado e ressuscitado, único salvador do homem, não é traduzível numa série de bons e de boas inspirações, homologáveis com a mentalidade mundana dominante. Jesus Cristo é uma “pedra”, come ele mesmo disse de si. Sobre esta “pedra” ou se constrói (confiando-se) ou se abandona (contrapondo-se): “Quem cair sobre esta pedra será estraçalhado; e se ela cair sobre alguém, o aniquilará” (Mt 21, 44). [...] Portanto, o ensinamento de Soloviev foi um profético e ao mesmo tempo um ensinamento amplamente não ouvido. Nós, porém, queremos tornar a propô-lo, com a esperança de que a cristandade finalmente se sinta interpelada e nele preste mais atenção.